ESPARGARÓ, UN CAMPEÓN DE FE
Campeón: Pol Espargaró (10/06/1991), 22 años Categoría: Moto2
Pol Espargaró empezaba 2013 como el gran favorito tras haber peleado hasta el final con Márquez el año anterior. El de Granollers lo sabía, y aceptó el reto desde el principio: ganó la primera carrera en Qatar en un bonito cuerpo a cuerpo con Redding, otro de los principales candidatos a ser campeón. Sin embargo, la cosa se complicó un poco en las siguientes carreras, ya que en Austin besó el asfalto por culpa de una espinillera, y en Francia también cayó en una imagen curiosa con Rabat, pues fueron idénticas caídas y simultáneas. Tras un cuarto puesto en Mugello, que le dejaba a casi 40 puntos del liderato, Pol reaccionó y se impuso en otro gran duelo con Rabat en el Gran Premio de Catalunya, una inyección de moral que le valió para hacer lo propio en Assen frente a Redding, en una carrera similar a la que había abierto el mundial en Qatar. La siguiente, en Alemania, Espargaró la acabó tercero para recortarle más puntos a Redding antes de irse al parón de vacaciones.
Redding. Precisamente el británico fue un hueso duro de roer para Espargaró. Tras vencer en Francia e Italia de manera consecutiva, y con cinco podios en ocho carreras, acabó tercero en Indianápolis, justo por delante de Pol, para mantenerse líder con un poco más de 20 puntos de ventaja. Después de una carrera discreta de ambos en Brno, una exhibición del inglés en su casa y un octavo de Pol dejaban el mundial muy complicado para el español, y en ese momento Scott parecía más fuerte que nunca. Sin embargo, Espargaró encadenó dos resultados muy positivos: victoria en Misano, con Scott sexto, y podio en Aragón, ganando el mano a mano al líder para recortarle más puntos. Ese probablemente fue el punto de inflexión del campeonato.
Y es que desde Misano, Redding no levantó cabeza, todo lo contrario que Pol. En Malasia, segundo puesto para el español, por un séptimo del británico. Y en Australia tuvo lugar el segundo momento decisivo del año: Scott se fracturó la muñeca en los libres y no pudo disputar la carrera. Pol arrasó y se colocó líder del mundial. En Japón, un Redding renqueante intentaba apurar sus opciones, pero la mala suerte se cebó con él y se volvió a ir al suelo. Espargaró ganaba aquella carrera y se aseguraba el título, a falta de la prueba final en Valencia. Pol se cayó cuando lideraba, pero poco importaba, pues ya era CAMPEÓN DEL MUNDO. Un vencedor que nunca perdió la fe en sus posibilidades.